Nunca se conoce a alguien tanto…

Nunca se conoce a alguien tanto…

Nunca se conoce a alguien tanto…


 

A mí es algo que me fascina. Cuando crees que conoces a alguien como tu propia mano, aparece una nueva arruga sin leer. ¿No te ha pasado alguna vez que preguntas algo aunque ya sabiendo la respuesta, crees que te sorprenderán con algo nuevo, y en realidad no? Y después con el tiempo, entiendes que la respuesta-comodín que siempre está ahí siempre se usa por motivos diferentes.

0 Comentarios

Dejar una respuesta